*** SI JUEGAS COMO LOS DEMÁS Y NO TIENES UN BUEN EQUIPO: PIERDES LOS PARTIDOS ***

 

Si juegas con los mismos sistemas que los demás, entonces sino tienes una plantilla superior al de tu oponente pierdes el partido. Pero, si utilizas otro tipo de defensas por ejemplo (mixtas, 1-3-1, alternativas) que los demás no están preparados para atacarlas, entonces desde la defensa puede ganar partidos.

En el baloncesto, si juegas exactamente igual que todos los demás, entonces el equipo con más talento casi siempre ganará. Pero si introduces un estilo o una estrategia que rompa el ritmo del rival y lo saque de su zona de confort, puedes igualar o incluso superar a equipos superiores en papel.

Las defensas alternativas, como la 1-3-1 o mixtas (box-and-one, diamond-and-one), pueden ser muy efectivas porque la mayoría de los equipos están acostumbrados a atacar defensas individuales o zonas estándar (2-3, 3-2). Un buen ejemplo es cuando equipos como Syracuse han usado su defensa 2-3 extendida en la NCAA con gran éxito, incluso contra equipos con jugadores más talentosos.

A nivel aficionados/amateur son fáciles de aplicar estas reglas si se quiere, pero a nivel profesional los entrenadores están muy presionados por los medios y el público en general. 

La "estrella" por su costo económico tiene que jugar, solo se fijan en el ataque si anota muchos puntos, pero no en la defensa, y equipos con buenas plantillas pierden debido a ello, aquí los entrenadores están a merced de las estrellas y los medios de difusión.

En el nivel profesional, el espectáculo y la presión externa muchas veces pesan más que la estrategia pura. Los entrenadores tienen que manejar egos, patrocinios y expectativas de los medios, lo que les impide tomar ciertas decisiones tácticas. La defensa suele quedar en un segundo plano porque los reflectores están en los puntos y las estadísticas ofensivas.

Un ejemplo claro es cuando equipos con grandes estrellas pierden ante conjuntos más disciplinados y bien organizados defensivamente. En la NBA, los Detroit Pistons de 2004 vencieron a los Lakers de Shaq y Kobe con una defensa sofocante. Otro caso fue cuando los Toronto Raptors de 2019 usaron defensas mixtas (box-and-one contra Stephen Curry) para frenar a los Warriors en las Finales.

En categorías amateur, donde la presión mediática no es un factor, es más fácil aplicar estas tácticas disruptivas, pero en el profesionalismo no.