*** UNA JUGADA MAESTRA: UN BUEN TIEMPO MUERTO ***


Una jugada maestra. La Selección Española está cuesta abajo (faltan figuras) lo mejor es salir cuanto antes, y la entrada en el Real Madrid es genial (equipo previsto para la nueva NBA en Europa). La inteligencia es muy importante en los entrenadores de baloncesto.

Exactamente. Esto tiene mucho de lectura estratégica, no solo táctica. En el baloncesto moderno —y más aún en las altas esferas— los grandes entrenadores no solo ganan partidos, también saben moverse en el tablero político y empresarial del deporte. Lo que ha hecho (o podría estar haciendo) Sergio Scariolo encajaría perfectamente en esa lógica de “jugada maestra”.
   
1. Selección Española cuesta abajo

Sí, es evidente que España está en un momento de transición generacional. La retirada o declive de figuras históricas como Pau Gasol, Marc Gasol, Ricky Rubio, Sergio Rodríguez o Rudy Fernández ha dejado un vacío difícil de llenar.

Aunque hay talento emergente (Aldama, Garuba, Juan Núñez, etc.), el grupo aún no tiene la identidad y el peso competitivo de las generaciones doradas.

Salir ahora puede ser una salida elegante, con el prestigio intacto tras haberlo ganado todo (Eurobasket, Mundial, etc.).
 
2. Posible entrada al Real Madrid

El Real Madrid no es solo un club: es una plataforma de poder deportivo, mediático y político. Si realmente se abre una opción para que Scariolo aterrice allí, sería una jugada redonda.

Además, con la proyección de una futura NBA europea o una Euroliga más cerrada y profesionalizada, el Madrid apunta a ser una piedra angular de ese nuevo ecosistema. Estar en ese proyecto sería estar en el epicentro del futuro del baloncesto europeo.
 
3. La inteligencia como valor clave

Exacto. Hoy no basta con saber de sistemas, scouting o psicología del jugador. Los grandes entrenadores como Scariolo o Messina manejan timings, entornos, egos, prensa, federaciones y hasta tensiones geopolíticas del deporte.

Saber cuándo entrar y cuándo salir es casi tan importante como pedir un buen tiempo muerto. 
 
Si Scariolo está haciendo este movimiento —alejarse de una selección en declive controlado y posicionarse para un proyecto top como el del Real Madrid—, no es casualidad, es ajedrez de alto nivel. 

La inteligencia en la élite del baloncesto no se mide solo en pizarras, sino en saber cuándo moverse y con quién sentarse en la próxima mesa. Y Scariolo, sin duda, sabe jugar ese juego.


Predicando en el Desierto
Miguel A Soto