El rebote si es importante.
Personalmente,
me gusta jugar con 3 altos en pista que me aseguren en defensa el rebote, con
un triángulo fuerte, mientras que en ataque suelo enviar hasta 4 jugadores al
rebote.
Por lo cual,
suelo entrenar el balance defensivo, haciendo que estos 4 jugadores sean
capaces de recuperar y llegar a defender el contraataque o la transición de los
contrarios.
A partir de
las categorías inferiores, el jugar con 3 o 4 pequeños en pista, suele ser
signo de derrotas, pues en las categorías seniors, quienes no tienen jugadores
altos lo fichan, saben de la importancia del número de posesiones que pueda
tener su equipo para ganar un encuentro.
En la
mayoría de las canteras de clubes amateur, no suele haber jugadores altos,
sino que cuando vemos a un buen jugador con 1,90 o algo parecido, lo ponemos
enseguida de pivot, y jugamos con hasta 4 pequeños en pista, eso sí con defensa
“pressing” a toda la pista, ya que como los contrarios tienen jugadores que no
saben ni botar, les ganamos de paliza, y somos muy buenos.
Luego si por
desgracia nos toca jugar en los sectores contra equipos de canteras de clubes
de ACB, nos encontramos que estos si tienen jugadores altos y bien preparados,
entonces la cosa cambia y somos nosotros los que recibimos las palizas.