EL SUEÑO AMERICANO.

 

Hablamos de "egoístas y superficiales", y no es totalmente exacto, ya que en realidad lo que nos hace ser egoístas, movernos, esclavizar a otros e incluso matar (guerras), es el dios dinero (poder), el fondo oscuro que mueve montañas, pues todo gira en torno a un mundo de codicia descontrolada y consumo.

Si queremos ser mejores en el baloncesto, en los estudios, en el trabajo, es siempre pensando en poder ganar más dinero, llegar a ser importantes (poder), pocos son los que estudian, trabajan o se culturiza para su disfrute personal, claro que todo lo podemos disimular con una hipocresía controlada, mentiras, medias verdades o manipulación, como suelen hacer los medios de difusión y propaganda.

Lo cierto es que todos, como animales que pertenecemos a la familia de los homo sapiens, queremos "más y más, y mucho más".

  

 

El baloncesto, que comenzó como un juego/entretenimiento en un colegio, lo hemos convertido en un reflejo del sueño americano (NBA), y es que, los ricos y poderosos han llegado a la conclusión de que hoy sobran en el mundo millones de personas. 

"Carecen de puestos de trabajo y no aportan nada a la producción capitalista, tienen poco dinero o ninguno y no aportan nada al consumo. No son rentables, son una rémora para la economía. Sobran".