Un baloncesto de niños.

Un partido de competición, es una guerra a pequeña escala, sin embargo, nuestra sociedad ha creado una juventud "buenista", así leemos que, por ejemplo, nuestras fuerzas armadas han ido a una guerra en son de paz, como si se tratara de una ONG.

Luego nos sorprendemos, que en nuestro baloncesto de élite, estén jugando tantos negros, extranjeros, comunitarios, y muchos menos españoles.

¿Quiere ello decir que nuestros jugadores hispanos, no valen para el baloncesto de élite?  

Pues yo diría que la mayoría no valen, ya que el baloncesto que practicamos a imagen y cada vez más reglas copiadas de la NBA, precisa de jugadores agresivos, altos, fuertes, veloces, grandes atletas, que nacen en los "playground" USA, en sus grandes universidades (aquí apenas se juega al baloncesto), o en países con una talla media alta de su población en general.

 

Mientras que, por otra parte, la "NECESIDAD OBLIGA", luchan por la necesidad de sacar a sus familias de la pobreza, viven el "sueño americano", nuestra juventud de clase media, la más numerosa en el baloncesto actual, vive "encerrada" con su ordenador o móvil el mayor tiempo posible, están más alejados de la realidad, su mundo es imaginario, placentero, egoísta, falso.

Un problema siempre tiene solución.