*** ¿Está el triple matando a la NBA? ***

En los últimos años, la NBA ha experimentado una revolución en su estilo de juego. El triple, que hace décadas era un recurso ocasional, se ha convertido en el eje central del baloncesto moderno.
La opinión de los expertos
Para figuras como Shaquille O’Neal, este cambio no es positivo. En declaraciones recientes, el exjugador culpó a Stephen Curry y los Golden State Warriors de haber «arruinado el baloncesto» al popularizar el triple como principal arma ofensiva.
Actualmente, equipos como los Boston Celtics lanzan más de 50 triples por partido, incluso Charlotte Hornets o Chicago Bulls superan los 40 intentos por encuentro. Este cambio no solo ha redefinido la estrategia dentro de la cancha, sino que también ha generado controversias entre analistas, exjugadores y aficionados.
Los datos de la temporada actual
La temporada 2024-25 ha marcado un hito en cuanto al volumen de triples intentados. En promedio, los equipos lanzan más tiros de tres puntos que de dos, una estadística impensable hace apenas una década. Boston lidera esta tendencia con 51.3 triples intentados por partido, mientras que equipos como Charlotte, Chicago y San Antonio también se suman a esta estrategia.
Los datos de la temporada actual
La temporada 2024-25 ha marcado un hito en cuanto al volumen de triples intentados. En promedio, los equipos lanzan más tiros de tres puntos que de dos, una estadística impensable hace apenas una década. Boston lidera esta tendencia con 51.3 triples intentados por partido, mientras que equipos como Charlotte, Chicago y San Antonio también se suman a esta estrategia.
¿Qué significa esto para el baloncesto?
Por un lado, el triple ha democratizado el deporte, permitiendo que jugadores más bajos y rápidos tengan un impacto crucial. Sin embargo, también está transformando la naturaleza del juego de manera irreparable.
La opinión de los expertos
Para figuras como Shaquille O’Neal, este cambio no es positivo. En declaraciones recientes, el exjugador culpó a Stephen Curry y los Golden State Warriors de haber «arruinado el baloncesto» al popularizar el triple como principal arma ofensiva.
Según Shaq, «la audiencia ha bajado porque estamos viendo siempre lo mismo. Hoy en día, todos los equipos tiran triples». Estas críticas reflejan una preocupación creciente: la falta de diversidad en el juego podría estar alejando a los espectadores.
No todos comparten esta opinión. Adam Silver, comisionado de la NBA, atribuye la disminución de audiencias a factores externos, como la competencia con eventos como las World Series de béisbol o las elecciones estadounidenses. Sin embargo, las palabras de Shaq resuenan entre aquellos que ven al baloncesto como algo más que un concurso de triples.
No todos comparten esta opinión. Adam Silver, comisionado de la NBA, atribuye la disminución de audiencias a factores externos, como la competencia con eventos como las World Series de béisbol o las elecciones estadounidenses. Sin embargo, las palabras de Shaq resuenan entre aquellos que ven al baloncesto como algo más que un concurso de triples.
La evolución del juego: ¿A dónde vamos?
El aumento en los lanzamientos de tres puntos no es el único cambio en la NBA. Paralelamente, la liga ha visto un resurgir de los hombres altos, como Victor Wembanyama (2,24 metros) o Dereck Lively (2,16 metros), que dominan el área pintada. Estos gigantes están redefiniendo el rol del pívot tradicional, no solo como protectores del aro, sino también como anotadores y distribuidores.
Sin embargo, incluso estos jugadores están adaptándose a la fiebre del triple. En el caso de Wembanyama, su habilidad para lanzar desde larga distancia ha generado debate.
El aumento en los lanzamientos de tres puntos no es el único cambio en la NBA. Paralelamente, la liga ha visto un resurgir de los hombres altos, como Victor Wembanyama (2,24 metros) o Dereck Lively (2,16 metros), que dominan el área pintada. Estos gigantes están redefiniendo el rol del pívot tradicional, no solo como protectores del aro, sino también como anotadores y distribuidores.
Sin embargo, incluso estos jugadores están adaptándose a la fiebre del triple. En el caso de Wembanyama, su habilidad para lanzar desde larga distancia ha generado debate.
Algunos analistas creen que debería centrarse más en el juego interior, aprovechando su envergadura y técnica. «Abusar del triple no es bueno para él ni para el baloncesto», argumentan.
Para muchos aficionados, el baloncesto de hoy carece de la variedad que caracterizaba épocas pasadas. Partidos como el histórico enfrentamiento entre los Golden State Warriors y los Dallas Mavericks, donde se anotaron 48 triples, son una muestra del extremo al que ha llegado esta tendencia. Aunque impresionantes desde el punto de vista estadístico, estos encuentros pueden resultar monótonos para quienes disfrutan de otro estilo.
El baloncesto siempre ha sido un deporte en constante evolución. Desde la introducción del triple en 1979 hasta el dominio de los pívots en los 90, cada era ha tenido su sello característico. Sin embargo, la «dictadura del triple» podría estar llevando al juego a un punto de no retorno.
La pregunta es: ¿puede el baloncesto encontrar un equilibrio entre el espectáculo y la diversidad estratégica? Solo el tiempo lo dirá, pero una cosa es clara: el futuro del juego dependerá de su capacidad para reinventarse sin perder de vista lo que lo hizo grande.
