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*** LOS BUENOS ESTUDIANTES DEL BASKET JEREZANO ***

El Juventud-Domecq Jerez tenía en su cantera de los años 80 muy buenos jugadores, pero también muy buenos estudiantes, indudablemente entraban en el equipo una vez que habían sido seleccionados, cualquiera no podía jugar en sus primeros equipos en todas las categorías, no pagaban cuotas o equipaciones, para ellos todo era gratis, incluso los desplazamientos y estancias en hoteles.

La mayoría eran buenos estudiantes, aprovechaban los desplazamientos para estudiar en el coche o en los autobuses, no perdían el tiempo con el móvil (no existía) o las redes sociales.

Recuerdo (por poner solo unos ejemplos de esta foto) a Francisco Antonio García Romero (el 3º por la izda agachado) se llevaba los libros de textos para estudiar en el coche (sacó el No. 1 en filología en la Universidad de Sevilla, Doctor en filología clásica (1988), Director del instituto Isabel de Hungría entre otros títulos académicos), otros como David Cárdenas (agachado con el balón) e Isidoro Gutierrez (arriba al lado mía), dejaron de jugar a los 18/19 años y se fueron a la universidad a estudiar, el primero es CATEDRÁTICO DE UNIVERSIDAD - Departamento de Educación Física y Deportiva de Granada y uno de los entrenadores de baloncesto con más prestigio en Andalucía (su hijo juega en EE.UU.) y el segundo en la actualidad secretario interventor en un ayuntamiento de Huelva.

Así podría contaros muchos casos de médicos, profesores de educación física, maestros, abogados, ingenieros, etc., todos ellos buenos jugadores, estudiaban y jugaban al baloncesto al mismo tiempo, no faltaban a los entrenamientos y menos a los partidos, su actitud en la cancha era siempre muy alta, dedicaban mucho tiempo al estudio y al baloncesto.

Con esto no quiero decir que los jugadores federados en la actualidad no estudien, sino que a mi modesto entender, tienen demasiadas "obligaciones" y entretenimientos, pero quizás lo más importante es tener los pies en el suelo y darse cuenta que del baloncesto no se puede vivir, eso es solo para algunos privilegiados, tenemos que ser consciente de nuestros límites y capacidades.



La realidad del baloncesto profesional en España es mucho más dura de lo que parece a primera vista.


1. Liga Endesa (ACB)

Aunque es la liga más importante y la que mejores sueldos ofrece, solo un 25% de los jugadores son españoles, lo que limita enormemente las oportunidades para los jugadores locales. La mayoría de los jugadores con buenos contratos son extranjeros o estrellas nacionales muy destacadas.

Esto significa que, para un jugador español que no es una gran estrella o que no ha sido seleccionado en equipos grandes, es difícil tener acceso a sueldos elevados.

2. Ligas LEB Oro y LEB Plata

LEB Oro (PRIMERA) y LEB Plata (SEGUNDA) no son consideradas ligas completamente profesionales. Los jugadores, en su mayoría, no tienen salarios que les permitan vivir cómodamente solo del baloncesto, muchos jugadores españoles en estas ligas son aficionados y a menudo necesitan tener otro empleo o estudiar para complementar sus ingresos.

Los extranjeros que juegan en estas ligas suelen ser los que reciben algún tipo de salario, pero muchas veces esto ocurre a través de economía sumergida, lo que también refleja la precariedad de la situación.

En resumen, para un jugador español, vivir del baloncesto en estas ligas es muy complicado. Muchos combinan el deporte con otro tipo de trabajo y, en muchos casos, lo ven más como una pasión que como una carrera sostenible.

3. Precariedad del baloncesto fuera de la ACB

La situación de los jugadores fuera de la ACB es especialmente dura. Los sueldos en las categorías menores son bajos o directamente inexistentes, lo que hace que muchos jugadores no puedan ni plantearse vivir del baloncesto.

Los jugadores españoles que compiten en estas ligas suelen estar más motivados por la pasión por el deporte que por las posibilidades de ganarse la vida con él.

4. Perspectiva a largo plazo

A nivel profesional, solo una pequeña élite de jugadores españoles en la ACB puede vivir del baloncesto. En las categorías inferiores, no hay una estructura profesional sólida que permita a la mayoría de los jugadores dedicarse exclusivamente a este deporte.

Muchos jugadores que no logran llegar a la ACB se ven forzados a considerar carreras paralelas o cambiar de deporte antes de retirarse.

Conclusión

El baloncesto en España es una profesión que, fuera de la ACB y algunos casos puntuales, es muy difícil que garantice un salario suficiente para vivir exclusivamente de ello. 

Las ligas como PRIMERA Y SEGUNDA no son verdaderamente profesionales, y los jugadores que ganan dinero suelen ser extranjeros. 

Para un joven español, la posibilidad de vivir del baloncesto es extremadamente limitada, y por eso es crucial combinar el deporte con una educación sólida o una formación profesional que le asegure un futuro más estable.